La política energética de Vicente Fox

La política energética de Vicente Fox O. Sarhí Ángeles Cornejo*

La simple observación de los datos del sector energético durante el sexenio 2001-2006, permiten hacer una primera evaluación de las políticas gubernamentales aplicadas en todo el sector energético, así como de los principales subsectores que lo integran: Petróleo El gobierno de Fox continuó con la política de aumentar la producción de petróleo para elevar su exportación a Estados Unidos. En el año 2000, la producción de crudo fue de 3 millones 12 mil barriles diarios en promedio; en octubre de 2006, dicha producción alcanzó un promedio de 3 millones 293 mil barriles al día. En los primeros años del sexenio continuó con la política de agotamiento progresivo de las reservas probadas de crudo, al bajar la tasa de reposición de reservas: en 2000, dicha tasa fue de 83.5 por ciento, y bajó a 14.4 por ciento en 2002; para 2006 se elevó a 59.2 por ciento (Fox, 2006). El cuadro 1 muestra la disminución que observaron las reservas probadas de petróleo y otros hidrocarburos durante el sexenio. En 2006, las reservas probadas de hidrocarburos se redujeron al 43 por ciento de lo que eran en el 2000, las de petróleo se redujeron a 47.96 por ciento del nivel que tenían en 2000, las de gas natural, en octubre 2006, eran apenas 47.89 por ciento del monto que tenían en 2000, y las reservas probadas de condensados en 2006 eran el 51 por ciento del total que alcanzaron en 2000. En gran parte, esa reducción obedece a que, a partir 2002, la evaluación de las reservas probadas del país se realiza de acuerdo con las definiciones de la Securities Exchange Commission (SEC) de Estados Unidos de América. (Pemex, 2004).

Cuadro 1 Reservas probadas de hidrocarburos en México, 2000 -2006 (Millones de barriles de petróleo crudo equivalente) Hidrocarburos Crudo Gas natural Condensados

2000 34,104 24,631 5,844 3,629

2006 16,470 11,814 2,799 1,857

Fuente: Vicente Fox, Sexto Informe de Gobierno , 2006.

Las exportaciones de petróleo tuvieron un crecimiento importante: en 2001 fueron de 1 millón 756 mil barriles diarios en promedio; para octubre de 2006 promediaron 1 millón 821 barriles al día. De ese total, se exportó a Estados Unidos el 87 por ciento en 2001, porcentaje que se elevó a 89 por ciento en 2006. Durante el sexenio, las exportaciones de petróleo crudo significaron un total de 121 mil 376 millones de dólares, en gran medida producto del aumento del precio internacional del petróleo. De esa enorme suma de petrodólares que aportaron las exportaciones de petróleo crudo en el sexenio, 35 mil 834 millones de dólares se gastaron en importaciones de productos derivados del petróleo file:///C|/Users/Alejandro/Pictures/Documents/ajgs2008/La%20política%20energética%20de%20Vicente%20Fox.htm[16/02/2011 11:13:30 p.m.]

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(gasolina, otros petrolíferos y petroquímicos y en gas natural). Otra parte importante de los ingresos derivados de las exportaciones se destinó a aumentar la reserva internacional de divisas del país. Se utilizó con fines macroeconómicos, particularmente para mantener un tipo de cambio del peso sobrevaluado, en lugar de utilizarla en el fomento a las actividades productivas que derivara en creación de empleos, destinarla al impulso de energías alternativas, preparando la transición energética para cuando los hidrocarburos se agoten, reinvertirla en Pemex para aumentar la refinación y la producción de petroquímicos, con el fin de reducir las importaciones, impulsar la exploración para restituir las reservas de petróleo y gas extraídas o dedicarla al pago de la creciente deuda externa de la empresa. Gas natural Durante el sexenio, la producción de gas natural creció de 4 mil 511, en 2001, a 5 mil 559 millones de pies cúbicos, en octubre de 2006 (cuadro 2). Tuvo un crecimiento en términos absolutos de mil 48 millones de pies cúbicos al día entre 2001 y 2006, equivalente a 23.2 por ciento. En cambio, el consumo de gas natural en el país aumentó de 4 mil 358 millones de pies cúbicos diarios, en 2001, a 5 mil 890 millones de pies cúbicos en 2005. El aumento del consumo fue de mil 532 millones de pies cúbicos diarios, equivalente a 35 por ciento de 2001 a 2005, contrastando con el de la producción que fue de 23.2 por ciento en el mismo periodo (Sener, 2006).

Cuadro 2 Producción de gas natural por tipo, 2001 -2006ª

2001

(Millones de pies cúbicos diarios) 4,511

3,239

1,272

2006 a

5,559

3,161

2,398

Fuente: Pemex, Indicadores petroleros, octubre 2006. a

Octubre.

El desequilibrio entre oferta y demanda de gas natural ha dado lugar a un crecimiento continuo de las importaciones de gas natural; las compras externas aumentaron de 281 millones de pies cúbicos en el año 2000 a 905 millones en el 2005, alcanzando un crecimiento de 223.2 por ciento. En 2004 las importaciones alcanzaron un pico de mil 124 millones de pies cúbicos diarios. Ese desequilibrio entre oferta y demanda se debe, por un lado, a las dificultades que enfrenta Pemex para aumentar la exploración y extracción de gas natural. A pesar de que por ley, según lo establece la Constitución, Pemex tiene la exclusividad para producir el gas natural que demanda el país, se le ha impuesto un debilitamiento financiero y políticas para que no produzca el gas necesario para abastecer la demanda interna, incluso, se continuaba exportando a la vez que crecían las importaciones. Por otro lado, se ha inducido el crecimiento de la demanda de gas natural, sobre todo en el sector eléctrico, mediante el otorgamiento de permisos por parte de la Comisión Reguladora de Energía (CRE) a las empresas privadas que entraron a partir del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos y Canadá, en 1994, para que generen electricidad con base en la tecnología de ciclo combinado, usando gas natural. Incluso, en las plantas que licita la CFE, en particular las denominadas productores independientes (IPPs) o productores externos de energía (PEEs) utilizan dicha tecnología y la CFE se compromete a abastecerles del gas por el periodo del contrato y absorbe los cambios en el costo del gas. Como resultado, el sector eléctrico aumentó casi al doble su consumo de gas: de mil 11 millones de

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pies cúbicos en 2001 a 2 mil 14 millones de pies cúbicos diarios en 2005. Las importaciones del sector pasaron de 26 millones de pies cúbicos diarios, en 2001, a 280 millones de pies cúbicos en 2005, representando un crecimiento de casi mil por ciento, varias veces superior al incremento de las importaciones totales del país en ese lapso, de 223 por ciento. Las empresas eléctricas transnacionales, en su gran mayoría privadas, denominadas Productores Externos de Energía, son las que registraron el mayor crecimiento en el consumo de gas natural; pasaron de consumir 19 millones de pies cúbicos de gas al día, en el año 2000, a 918 millones de pies cúbicos diarios, en 2005. Esta política ejercida por el gobierno del presidente Fox en gas natural ha causado profundos y complejos problemas al país, entre los que figuran los siguientes: 1) Ha presionado para Pemex a elevar la producción de gas natural, en particular de gas no asociado. Ha tenido que emprender programas especiales como el Programa Estratégico de Gas (en 1999) que proyectó un presupuesto de 12 mil 500 millones de dólares, cubiertos, en su mayoría, con endeudamiento vía Pidiregas, dejando con ello enormes ganancias al capital financiero internacional, En 2002, el gobierno de Vicente Fox lanzó el programa de gas de Pemex, presentado por Muñoz Leos, entonces director de la paraestatal, en el que privilegió el impulso al gas natural no asociado, con efectos múltiples en la industria, incluso de carácter regional. 2) Ha servido de pretexto al gobierno y a las autoridades de Pemex para acelerar la privatización de la extracción de gas natural no asociado, primero mediante la creación de los Contratos de Servicio Múltiples (CSM), violatorios de la Constitución por ser, de hecho, contratos de riesgo, que fueron entregados a empresas privadas que obtuvieron las licitaciones de los bloques de la Cuenca de Burgos realizadas entre 2003 y 20041 . Ante las denuncias jurídicas presentadas por un amplio número de legisladores para anular dichos contratos, las autoridades optaron por presentar los CSM como Contratos de Obra Pública, cuando en realidad no lo son y, como ha demostrado José Luis Manzo 2 , son contratos de explotación petrolera, actividad que por mandato constitucional debe desempeñar la nación de manera exclusiva, a través de Pemex. En su empeñó por privatizar la extracción de gas natural, el presidente Fox envió una iniciativa al Congreso de la Unión (12 de septiembre de 2005) para permitir la inversión privada en la exploración y extracción de gas natural no asociado, como parte de las 10 medidas que propuso en esa fecha. 3) Ha aumentado la dependencia de México del gas del exterior, proveniente solamente, hasta hace unos días, de Estados Unidos donde el precio Henry Hub, el precio de referencia que México utiliza, es el más alto del mundo, debido a la elevada demanda de este país y la reducción de las reservas de gas de México y de Canadá, sus principales proveedores. 4) Una política de precios del gas en México, basada en el precio del gas Henry Hub del Canal de Houston, al que se agrega el costo de transporte, ha significado un aumento de los costos de producción de Pemex, ya que en lugar de que México el precio del gas natural se fije de acuerdo al precio que Pemex lo extrae, utiliza ese precio de referencia externo como precio de transferencia en sus empresas subsidiarias (Pemex Gas y Petroquímica Básica, Pemex Refinación, Pemex Petroquímica) y, en general, de las empresas en el país, miles de ellas han tenido que sucumbir a la competencia, en particular aquéllas cuyo insumo principal es el gas natural. 5) Con el pretexto de promover la oferta para atender el crecimiento de la demanda de gas natural en el país, el gobierno, interesado en promover los grandes negocios para los inversionistas privados, principalmente para las corporaciones transnacionales de la energía y para el capital financiero, autorizó la instalación de plantas de regasificación de gas natural licuado en varios lugares estratégicos del territorio mexicano (cuadro 3) a pesar de las protestas ciudadanas por el impacto

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ambiental negativo y por el riesgo a la seguridad territorial del país que implican.

Cuadro 3 Permisos de almacenamiento otorgados por la Comisión Reguladora de Energía Permiso y empresa Transnacionales Permiso G/161/ALM/04 otorgado a Chevron Texaco de México Chevron-Texaco Permiso G/140/ALM/03 otorgado a Energía Costa Azul SEMPRAI 1 Permiso G/139/ALM/03 otorgado a Terminal GNL de Baja California Permiso G/138/ALM/03 otorgado a Terminal GNL de Altamira Permiso G/136/ALM/03 otorgado a Gas Natural Baja California

Grupo DUTCH/Shell Shell 2 Marathon

País Estados Unidos Estados Unidos Inglaterra/Holanda Inglaterra/Holanda Estados Unidos

Fuente: Elaboración propia con datos de la Comisión Reguladora de Energía; Registro Público de Permisos, México, y páginas web de las empresas. 1

2

Shell comparte 50 por ciento de la inversión en el proyecto.

Total, empresa francesa, adquirió 25 por ciento del capital en el proyecto.

Se han propuesto ya otros lugares para instalar plantas de regasificación de gas natural licuado como Topolobampo, Manzanillo y Lázaro Cárdenas en Michoacán. Estas plantas alimentarán ductos que transportarán el gas a las plantas de generación eléctrica privadas del exterior, la mayoría instaladas en la frontera norte de México y construidas por empresas transnacionales para abastecer a Estados Unidos. La vigencia del precio del gas Henry Hub en México permitirá la obtención de ganancias extraordinarias a las empresas transnacionales petroleras que suministran el gas importado a México, ya sea porque lo extraen de los yacimientos que explotan en otras partes del mundo o porque lo adquieren a precios inferiores al Henry Hub. Con la privatización de la extracción del gas natural se ha ido articulando una industria privada del gas no asociado, desde la generación hasta la petroquímica y su infraestructura de transporte, manejada por las grandes corporaciones transnacionales de la energía, principalmente por mayores empresas transnacionales petroleras, denominadas majors, creando complejos integrados internacionalmente, sobre todo a Estados Unidos. En la región de la Cuenca de Burgos ya empezó a operar la planta de regasificación de gas natural licuado de Altamira instalada por Shell para abastecer de gas a las empresas eléctricas extranjeras, mediante la red de gasoductos de la CFE para interconectarse con Texas. Ese era uno de los objetivos explícitos del Programa de Gas de Pemex, presentado el 20 de junio de 2002 por Muñoz Leos, director de la paraestatal: “aumentar la capacidad de interconexión de nuestra red de ductos con la de los Estados Unidos y dar a Pemex mayor seguridad de acceso a los gasoductos del estado de Texas” (Muñoz Leos, 2002). Por el oceáno pacífico aumenta la interconexión con California, particularmente con San Diego, Estados Unidos, que será alimentado de gas natural desde México por una de las plantas de regasificación de gas natural licuado autorizada por la CRE. La estrategia de gas de Pemex también “propone aumentar la producción de gas natural, asociado y no asociado, para alcanzar a casi 7 (6 mil 800) mil millones de pies cúbicos en 2006. Esta meta no fue alcanzada. Desperdicio del gas natural Contradictoriamente a la baja oferta interna de gas natural en el país, el gobierno de Fox continuó con el envío de gas a la atmósfera. Este desperdicio representó un porcentaje de 4.7 por ciento de la producción total de gas natural (Pemex 2006ª).

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En gas licuado de petróleo En 2001, bajo el gobierno del presidente Fox, la SENER y la Secretaría de Economía emitieron criterios para que los permisionarios puedan contar con la posibilidad de surtirse de dicho energético a partir de otras fuentes adicionales a las de Pemex. Al final de su gobierno se aprobó una iniciativa para permitir la inversión privada en la explotación del gas grisú de las minas de carbón. Refinación La producción de derivados del petróleo se mantuvo estancada durante el sexenio a pesar del crecimiento de la demanda interna.

Cuadro 4 Pemex: producción de refinados, 2001 -2006ª (Miles de barriles diarios)

2001

Total 1,472.8

Gas licuado 233.3

Gasolinas 390.4

Querosenos 57

Diesel 281.6

Combustóleo 435.9

2006 a

1,545.7

245.2

453.2

64.3

325.7

328.6

Fuente: Pemex, Indicadores petroleros, octubre de 2006. a

Octubre.

Se dejó a empresas foráneas el abasto del mercado interno no cubierto por Pemex, como otra de las políticas privatizadoras del modelo neoliberal y quita a las empresas estatales la parte del mercado nacional que implica la expansión de la demanda. Por la vía de las importaciones se va cediendo a empresas del exterior el crecimiento del mercado interno que, adicionalmente, se benefician al vender al precio internacional más alto. Éste es el sentido de los precios de referencia que aplican internamente los gobiernos neoliberales del país. Basta señalar el crecimiento de las importaciones de gasolinas; en el sexenio pasaron de un promedio de 136 mil barriles diarios en 2001 a 202 en promedio en 2006, como se ilustra en el cuadro 5.

Cuadro 5 Importaciones de gasolinas y otros petrolíferos, 2001 -2006 a (Miles de barriles diarios)

2001

Total 335.3

Gas licuado 99.8

Gasolinas 136

Diesel 6.7

Combustóleo 85.2

Otros 7.6

2006 a

360.2

66.8

202

43.1

15.9

32.3

Fuente: Pemex, Indicadores petroleros, octubre 2006.

La erogación de divisas para pagar las importaciones de petrolíferos pasó de 3 mil 656.2 millones de dólares, en 2001, a 8 mil 395.3 en octubre de 2006. (Pemex, 2006).

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Petroquímica La producción de petroquímicos se redujo durante el sexenio de Fox de 10 mil 377 toneladas a 9 mil 158 toneladas en octubre de 2006 (Pemex 2006). La industria petroquímica ha sido abandonada a la destrucción, incluso física. De 62 plantas que operaban antes de la reclasificación de los productos petroquímicos básicos, que terminó en 1992, hoy solamente operan 30. Varios complejos petroquímicos y plantas están fuera de operación 3 . La capacidad instalada en la industria petroquímica de Pemex se redujo de 57 por ciento, en 2001, a 37 por ciento en 2005 (Salmerón, 2006). No bastó la privatización de la petroquímica básica; simplemente las corporaciones transnacionales de la petroquímica, en su mayoría parte de las grandes transnacionales petroleras optaron por no producir en México, sino abastecer al país desde el exterior. Electricidad El gobierno de Fox profundizó la privatización de la industria eléctrica, primero, mediante un decreto para eliminar el límite a la venta de excedentes a la CFE por parte de las empresas privadas generadoras de electricidad. Después que fue rechazado, envió al Congreso una propuesta de reforma eléctrica para la creación de un mercado mayorista bajo la operación de empresas privadas. A pesar de que aún no ha sido aprobada, en la práctica, mediante el otorgamiento de permisos por parte de la Comisión Reguladora de Energía (CRE), el gobierno aceleró la privatización extranjerizante de la industria, al dejar que toda la expansión de la capacidad efectiva en el sexenio fuera realizada, casi en su totalidad, por empresas privadas, denominadas productores externos de electricidad (PEEs), como puede observarse en el cuadro 6. La capacidad efectiva total aumentó 8 537 MW, y la de los PEEs se incrementó en 7 mil 322 MW, representando el 87 por ciento del total.

Cuadro 6

Capacidad efectiva de generación

Año 2000 2001 2002 2003 2004 205 2006

Total 36,697 38,519 41,184 44,561 46,552 46,533 47,056

Hidroeléctrica 9,619 9,619 9,615 9,615 10,530 10,536 10,566

Termoeléctrica 21,772 22,639 23,264 23,264 23,830 22,820 22,792

PEE 2

(Megawatts) Carboeléctrica

484 1,455 3,495 6,756 7,265 8,251 8,771

2,600 2,600 2,600 2,600 2,600 2,600 2,600

1

Nucleoeléctrica

Geotermoeléctrica

Eoloeléctrica

1,365 1,365 1,365 1,365 1,365 1,365 1,365

855 838 843 960 960 960 960

2 2 2 2 2 2 2

julio Fuente: Secretaría de Energía, Información básica, Estadísticas de electricidad (www.sener.gob.mx), 16 de octubre de 2006. 1

2

Al término de cada periodo, sin incluir capacidad de cogeneradores y autoabastecedores.

Comprende la capacidad instalada de los productores externos de energía (PEE´s).

La capacidad instalada total de generación de electricidad en el país en 2005 fue de 58 mil 412 MW, de los cuales el 68.8 por ciento correspondió a CFE, 1.6 por ciento a LFC, 14.2 por ciento a PIEs, 8.5% a autoabastecedores, 3.1 por ciento a autogeneradores y 1 por ciento a otros usuarios (Sener, 2006). Durante el sexenio, se les fue arrebatando el mercado a las empresas estatales, CFE y LFC, mediante el otorgamiento de permisos para autoabastecimiento a empresas privadas que aprovecharon esta

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figura para crear sociedades, incluyendo como socios a un amplio número de empresas, importantes clientes de las empresas estatales, a las que les suministraban electricidad, utilizando la red de transmisión y distribución de CFE por un peaje muy bajo. Mediante el uso indebido de la figura del autoabastecimiento, empresas privadas, como Enron, formaron sociedades para abastecer a grandes empresas y municipios, antes abastecidos por CFE o LFC. Además, se profundizó el endeudamiento de CFE mediante los Pidiregas y se propuso la participación de la inversión privada en las energías renovables para la generación de electricidad, atendiendo a la propuesta del Banco Mundial. Las empresas extranjeras recibirán importantes fondos que México debería recibir, como subsidio por ser energías limpias. Evaluación más amplia En términos generales, puede considerase que el gobierno del presidente Fox continuó y profundizó la aplicación de las políticas privatizadoras extranjerizantes del sector energético que comenzaron los gobiernos que le precedieron: Miguel de la Madrid, Carlos Salinas y Ernesto Zedillo. Adicionalmente, aplicó nuevas políticas para impulsar directa e indirectamente la reforma privatizadora del sector energético, propia del modelo neoliberal introducido en el país a fines de 1982, como resultado de los condicionamientos de política económica exigidos por los acreedores internacionales para dar una salida a la crisis de la deuda externa en la que cayo el país al financiar con crédito externo su reconversión en exportador de crudo en el decenio de los setenta y principios de los años ochenta. Tales condicionamientos fueron concretados en políticas de austeridad diseñadas por el Fondo Monetario Internacional y de ajuste estructural por el Banco Mundial; posteriormente, se agruparían en el “Consenso de Washington”. La aceptación del enorme crédito ofrecido al país por la banca transnacional y organismos financieros internacionales, interesados en participar de la riqueza petrolera del país, sería el mecanismo a través del cual funcionarios y gobiernos del país coadyuvarían a la introducción del modelo neoliberal en México. En Chile se introdujo mediante el golpe militar de Pinochet en 1973. Dicho modelo basado en las tesis monetaristas de la Escuela de Chicago, para combatir la inflación creciente en el mundo resultante de la crisis del capitalismo internacional en los años setenta, en el fondo introdujo un conjunto de políticas promotoras de la expansión mundial del capital transnacional, la llamada globalización o más propiamente mundialización, como la apertura de las economías, la redefinición de la intervención del Estado, en particular su retiro de las actividades económicas, recurriendo a argumentos ideológicos, como el de que las empresas privadas son más eficientes que las estatales. El propósito era lograr que las actividades económicas rentables administradas por el Estado pasaran a manos del capital privado, fundamentalmente el transnacional predominante o fueran explotadas por él. El gobierno de Fox, al igual que los gobiernos neoliberales que le precedieron, dio un impulso decidido a ese modelo en el país y en el sector energético principalmente, a partir de tres ejes fundamentales: 1) Profundización de la reforma neoliberal privatizadora, llamada reforma estructural del sector energético (petróleo, gas natural, electricidad, etcétera) que, en forma gradual y actuando en contra de la Constitución Política del país, llevaron a cabo los gobiernos neoliberales que le precedieron para abrir cada vez más el sector energético a inversionistas privados, fundamentalmente a las grandes corporaciones transnacionales de la energía y capital financiero internacional. 2) Impulso decidido a la integración energética de América del Norte y continental, promovida por Estados Unidos. 3) Debilitamiento de las empresas estatales.

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1) En cuanto a privatización Una característica relevante del presidente Fox fue el ofrecimiento sistemático al capital transnacional de la apertura del sector energético de México en cada foro internacional al que asistía, mientras que en México negaba sistemáticamente la privatización de Pemex, CFE y LFC. Años antes, en 1996, cuando era gobernador de Guanajuato, Vicente Fox, hizo en un foro neoyorkino su primer compromiso internacional pronunciándose sacrílegamente por la privatización de Pemex. Fox dijo que en esa materia “el camino es privatizar, no hay duda, aunque no en este momento, cuando impera la corrupción del gobierno, sino hasta que tengamos una democracia plena, hasta que se coordine con todo el mundo, que todo mundo lo haya aceptado”. La privatización debe hacerse, según Fox, “bajo condiciones cristalinas, transparentes, honestas, de modo que el producto de eso pueda ser reinvertido en desarrollo, porque hasta ahora el producto de eso ha ido sólo a deuda y más deuda, ha ido sólo a programas sociales que no han resuelto los problemas de la gente”. Citado por Héctor Aguilar Camín en la revista Proceso (27 de mayo de 1996). A lo largo de su gestión en la Presidencia de la República, Fox realizó una acción continuada por consolidar el proceso de privatización del sector energético, tanto en el subsector hidrocarburos, como en electricidad. En el cuadro 7 se presentan (remarcadas en negritas) las actividades privatizadas del sector energético, hidrocarburos y electricidad, antes y durante la administración del presidente Fox.

Cuadro 7

Actividad

Privatización del sector energético durante el gobierno de Fox 1983-2000 2001-2006 Actividades privatizadas o realizadas por empresas privadas (en Políticas aplicadas y propuestas privatizadoras por el gobierno de Fox (en negritas) negritas)

Todo el sector Financiamiento Apertura a la IP Pemex:

Introducción de Pidiregas (1997) Mediante contratos, concesiones, licitaciones

Financiamiento Administración

Aumento excesivo del endeudamiento externo, principalmente por Pidiregas Aumento del contratismo en todas las actividades del sector energético Importación creciente de gas natural, gasolinas y otros petrolíferos y petroquímicos Pidiregas, bursatilización y otros instrumentos (Master Fund), etcétera Propuestas de autonomía de gestión (SUMA) y de gestión corporativa de Pemex

Petróleo: Exploración Extracción Transporte Comercialización

Realizada por empresas privadas vía contratos Realizada por empresas privadas vía contratos Se vendió la flota de buquetanques PMI

Cogeneración

Aumento del contratismo Aumento dle contratismo Realización del transporte marítimo del petróleo por empresas extranjeras

Participación privada en cogeneración de electricidad en Pemex

Refinación Transporte

Asociaciónes externas

Comercialización

Franquicias

Petroquímica

Privatizada

Gas natural:

Propuesta para construcción de una refinería en Centroamérica Propuesta para privatizar ductos de petrolíferos

Propuesta para privatizar el sector gas no asociado

Exploración Extracción Transporte Distribución

Realizada por empresas privadas vía contratos Realizada por empresas privadas vía contratos Privatizada Privatizada

Contratos de servicio múltiples Contratos de servicio múltiples Privatización de la explotación de gas grisú

Almacenamiento GLP

Privatizada

Instalación de plantas de regasificación Nueva reglamentación, permite proveedores adicionales a pemex

Electricidad:

Propuesta de reforma privatizadora radical

Propuesta de reforma eléctrica para crear un mercado mayorista Propuesta de participación privada en energías renovables

Generación Transmisión y distribución Integración:

Entrada de empresas privadas ext Realizada por empresas privadas vía contratos con CFE TLCAN

Decreto para eliminar el límite del excedente a vender a CFE (Rechazado) Plan Puebla Panamá, ASPAN, Mayor integración a EU

Fuente: Elaboración propia con base en el seguimiento de la información oficial.

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2) Impulso decidido a la integración energética de América del Norte y continental promovida por Estados Unidos Durante todo el sexenio, Fox impulsó esa integración en América del Norte, subordinada a los intereses de Estados Unidos y a las corporaciones transnacionales y del capital financiero internacional, instituidos en el TLCAN. Desde el comienzo de su administración, con la declaración conjunta con los mandatarios de Estados Unidos y Canadá, en el marco de la Tercera Cumbre de las Américas, efectuada en Québec, Canadá (2001), hasta culminar con la firma de la Alianza para la Seguridad y la Prosperidad de América del Norte (ASPAN) 4 , en marzo de 2005, en el capítulo relativo a la seguridad energética de América del Norte, cuyo objetivo, como se indicó, es garantizar el abasto de energía seguro, sostenible y asequible; esta alianza se ratificaría en la declaración conjunta de mandatarios del 31 de marzo de 2006. Durante el sexenio de Fox se intensifica la integración energética de México con Estados Unidos, mediante la construcción de una infraestructura en cuanto a ductos, plantas de generación eléctrica, de regasificación, de explotación de yacimientos, como la Cuenca de Burgos, para abastecer a Estados Unidos, y no solamente mediante acuerdos. En la práctica se reafirma la supeditación de México a cumplir el papel de abastecedor energético de la potencia mundial, que tiene un enorme consumo energético y escasas reservas de hidrocarburos, sobre todo de petróleo, aunada a una política conservacionista de sus limitadas reservas. Estados Unidos ha conseguido de los gobiernos mexicanos echar mano de los recursos energéticos de México, mediante la utilización de diversos mecanismos y políticas como: empréstitos, el tratado de libre comercio y políticas económicas que han hecho depender el crecimiento de la economía del país de la dinámica de las exportaciones, de políticas privatizadoras y, en general, del Consenso de Washington, vehículo del modelo neoliberal, del capital transnacional, en México. Estados Unidos ha logrado que México sea su reserva energética y que, adicionalmente, su explotación sea principalmente negocio de las empresas de ese país, cargando sobre México los costos económicos de esa explotación, de la contaminación que genera y del agotamiento de sus reservas energéticas. En la alianza (ASPAN) los presidentes de los países de América del Norte toman los acuerdos sin el Congreso. En cuanto al sector energético dieron una gran importancia al gas natural y a las energías renovables. Al respecto acordaron: - Examinar, mediante un estudio, la dinámica y evolución del mercado de gas natural en la región. - Examinar la regulación de este mercado, con el fin de identificar mejores prácticas para el suministro eficiente de gas natural. - Promover el desarrollo de tecnologías de energía renovable, mediante el intercambio de información de políticas y proyectos en los tres países: desarrollo y comercialización de sistemas eólicos, desarrollo de un mapeo de recursos energéticos y etiquetado y certificación común de productos energéticos. - Creación de un portal de información energética trilateral, que facilite el intercambio de información en este sector. La ASPAN representa una fórmula de integración acorde a las circunstancias particulares de la región (Secretaría de Relaciones Exteriores, página web). En cuanto al impulso a la integración energética continental, promovida por Estados Unidos, el file:///C|/Users/Alejandro/Pictures/Documents/ajgs2008/La%20política%20energética%20de%20Vicente%20Fox.htm[16/02/2011 11:13:30 p.m.]

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gobierno de Fox fue un impulsor activo, incluso del ALCA; propuso el Plan Puebla Panamá (PPP) desde el inicio de su administración y dentro de las acciones realizadas para impulsar la integración energética con Centroamérica, Rosío Vargas indica que: “El 14 de diciembre del 2005, los presidentes y representantes de los países centroamericanos, de República Dominicana, así como de México y Colombia se reunieron en Cancún, Quintana Roo, con el fin de acordar la integración energética para América Central. Bajo la denominada “Declaración de Cancún”, los miembros del Sistema de Integración Centroamericana (SICA) definieron los proyectos para avanzar en esta alianza: la construcción de una refinería; una planta de generación de electricidad; una red de gasolinerías de Petróleos Mexicanos (Pemex), la integración eléctrica MéxicoCentroamérica-Colombia, la integración gasera de la región, el impulso a las energías renovables y la eficiencia energética. También, se avanzó en la propuesta para la construcción de una regasificadora para importar gas natural licuado de países fuera de la región en el futuro. Este conjunto de proyectos, también publicitado como la Iniciativa Mesoamericana, si bien parece algo novedosa, en realidad no lo es, ya que forma parte del Plan Puebla Panamá (PPP) que, formalizado el 30 de noviembre de 2000, es una iniciativa, lidereada por México y el presidente Fox, para la inversión en infraestructura para la conexión urbana y rural de algunas ciudades mexicanas del sureste, a través de un conjunto de corredores que facilitarán la circulación de mercancías. Como parte de las iniciativas incorporadas al PPP, se incluyen las referidas al intercambio comercial, turismo, enlace vial, interconexión energética, así como unión de servicios de telecomunicaciones, entre los más importantes. En materia de energía, la propuesta del PPP pretende ubicar e interconectar los mercados eléctricos con el fin de promover un aumento de las inversiones privadas. Para ello se han elaborado los siguientes proyectos: 1) el Sistema de Interconexión Eléctrica Centroamericano (SIEPAC); 2) la interconexión México-Guatemala, y 3) la interconexión Guatemala-Belice. Como parte del Plan Puebla Panamá (PPP), la Iniciativa Mesoamericana tiene como finalidad la integración de los mercados eléctricos y complementa el PPP con algunos elementos adicionales de cooperación energética. La operatividad al PPP sería, precisamente, a través del Plan Integral Energético de Mesoamérica (Rosío Vargas, 2006). En términos generales, puede decirse que las políticas aplicadas por el gobierno del presidente Fox en el sector energético en México se encuadran en la estrategia de integración energética trazada por Estados Unidos. 3) Debilitamiento de las empresas estatales: Pemex, CFE y LFC Todas las políticas privatizadoras aplicadas por el gobierno de Fox, que al igual que sus predecesores neoliberales a cargo del Poder Ejecutivo en México violan la Constitución Política del país, han provocado un debilitamiento progresivo de las empresas estatales del sector energético, particularmente de Pemex, la joya de la corona, con el propósito de orillarlas a la privatización, para beneficio fundamental de las grandes corporaciones transnacionales y del capital financiero internacional. Adicionalmente, profundizó el endeudamiento, sobre todo externo, de las empresas estatales de la energía, mediante los Pidiregas y otros instrumentos de financiamiento, como colocación de bonos en el mercado bursátil de México y en otras plazas del exterior, principalmente en Estados Unidos. Prácticamente el total de la inversión en la industria petrolera se financia con Pidiregas, contrayendo mayor deuda externa; Pemex utilizó además una amplia gama de instrumentos como la colocación de bonos en la bolsa de valores, el Master Trust y certificados de participación patrimonial. La deuda total que Pemex reportó en septiembre de 2006 ascendió a 594.7 mil millones de pesos (Pemex, 2006a). Se ha llevado a la quiebra contable de Pemex, una empresa petrolera de enorme rentabilidad, como lo muestran los rendimientos que obtiene antes del pago de impuestos y otros cargos, así como a CFE y file:///C|/Users/Alejandro/Pictures/Documents/ajgs2008/La%20política%20energética%20de%20Vicente%20Fox.htm[16/02/2011 11:13:30 p.m.]

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LFC mediante la aplicación de un método de contabilidad neoliberal, que contabiliza en el presente como pasivos laborales todo lo que se pagará a los trabajadores cuando se jubilen, cuando en la realidad se paga según se vayan jubilando. No todos los trabajadores se jubilan al mismo tiempo. De igual manera se carga en el presente como pasivo todo lo que se debe por los créditos y pasivos, cuando estos se van pagando poco a poco. Paralelamente, la Secretaría de Hacienda se encarga de aplicarles impuestos extremadamente gravosos a Pemex y a las demás empresas estatales de la energía que equivalen a la confiscación de los ingresos generados por estas empresas. La participación de los impuestos en los ingresos de Pemex pasó de 49.4 por ciento, en el año 2000, a 61.4 por ciento, en 2004 (Pemex, 2005). Al término de la administración de Fox, el director de Pemex escudándose en la demanda de la autonomía de gestión, planteó la reintegración de Pemex en una administración centralizada, mediante una gestión corporativa integrada por prominentes empresarios para formar parte del Consejo de Administración de Pemex, como lo planteó al principio de su administración, llevando, de hecho, al retiro del Estado de la industria petrolera. La inversión, que es el eje de la acumulación, en Pemex se realiza con capital privado; menos del 5 por ciento de la inversión total es del presupuesto federal. De acuerdo con las cifras del cuadro 8, del total invertido por Pemex 95.6 por ciento va a Pemex Exploración y Producción; a Pemex Refinación solamente 2.8 por ciento, y a gas 1.2 por ciento; Pemex Petroquímica y otros el 0.4 por ciento. Como puede observarse, el capital financiero financiado por Pidiregas está en el corazón de la actividad petrolera y, en mayor proporción, en exploración y producción, obteniendo ganancias insospechadas. Fox y sus autoridades en Pemex han aumentado enormemente el endeudamiento externo de esta empresa por la vía de Pidiregas y otros instrumentos de financiamiento. En CFE y LFC ocurre lo mismo, aunque en menor proporción.

Cuadro 8 a Pemex: Gasto de inversión por empresa , 2001 -2005 (Millones de pesos) 2001

2005

PEMEX Inversión Total Inversión Programable Inversión PIDIREGAS

62,617 26,672 35,945

111,219 5,667 105,552

PEMEX Exploración y Producción Inversión Total Inversión Programable Inversión PIDIREGAS

53,446 17,501 35,945

106,287 3,464 101,823

5,501 5,501

3,086 627

PEMEX Refinación Inversión Total Inversión Programable Inversión PIDIREGAS PEMEX Gas y Petroquímica Básica Inversión Total

2,459

2,246

1,443

Inversión Programable

173

Inversión PIDIREGAS

1,270

PEMEX Petroquímica b Inversión Total Inversión Programable

1,058 1,058

15 15

366 366

388 388

Inversión PIDIREGAS Corporativo PEMEX Inversión Total Inversión Programable Fuente: Pemex, Anuario estadístico 2006 , México, p. 8.

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b

Flujo de efectivo.

Incluye Complejo Morelos.

En materia energética, Fox cumplió con los intereses que ahora gobiernan Estados Unidos, con los intereses de las corporaciones transnacionales de la energía y con el capital financiero internacional, al expandir a todo el sector energético la apertura a la inversión privada, dejándoles enormes ganancias que se filtraron a inversionistas locales que actuaron como subcontratistas o consiguieron contratos. Incluso, logró imponer a su sucesor para garantizar la continuidad de esa política, derrochando hasta los excedentes petroleros en el reparto de migajas para ganar apoyos locales a esa imposición. Tal continuismo recurre a un régimen de tipo Pinochet, porque se sabe impuesto a la fuerza, principalmente con el apoyo de los beneficiarios más relevantes y seguidores, y que el movimiento que aparece derrotado no cesará en su lucha histórica por cambiar el rumbo y para construir un país y una economía que sea incluyente y otorgue una vida mejor a todos sus habitantes, teniendo en el desarrollo del sector energético uno de sus pilares fundamentales.

Bibliografía -Aguilar Camín, Héctor, “Pemex: pregúntenle al dueño”, revista Proceso, No. 1021, 27 de mayo de 1996, México, p. 43. -British Petroleum, Statistics Review of World Energy 2006 (página Web). -Comisión Reguladora de Energía, Ley de la Comisión Reguladora de Energía. -CRE (2006), Estadísticas, permisos, electricidad (www.cre.gob.mx). -Muñoz Leos, Programa de Gas de Pemex, 2002. -Pemex (2003a), Boletín de Prensa, No. 268, 23 de octubre. -Pemex (2003b) Boletín de Prensa, No. 268, 23 de octubre. -Repsol-Pemex (2003), Boletín de Prensa No. 258, 16 de octubre. -Cuervito, Pemex (2003a), Boletín de Prensa No. 268, 23 de octubre. -Misión (Pemex, 2003b), Boletín de Prensa No. 278, 30 de octubre. Fronterizo (2003c), Boletín de Prensa, No. 325, 8 diciembre. -Pemex (2003), Boletín de Prensa, No. 258, 16 de octubre de 2003. -Petróleos Mexicanos (2006), Anuario Estadístico. -Petróleos Mexicanos (2006a), Resultados Financieros al 30 de septiembre de 2006. -Secretaría de Energía, Información básica, Estadísticas de electricidad. -Secretaría de Energía, Prospectiva de gas natural 2006-2015. -Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos y Canadá (TLCAN) capítulo VI. file:///C|/Users/Alejandro/Pictures/Documents/ajgs2008/La%20política%20energética%20de%20Vicente%20Fox.htm[16/02/2011 11:13:30 p.m.]

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-Secretaría de Relaciones Exteriores, ASPAN (página web). -Unión Nacional de Trabajadores de Confianza de Pemex (www. untcip.net). -Comisión Reguladora de Energía (2006), Estadísticas, permisos, electricidad (www.cre.gob.mx). -Unión Nacional de Trabajadores de Confianza de Pemex (www. untcip.net). -Vargas Rosío, revista Energía a Debate, febrero 2006. -Vicente Fox, Sexto Informe de Gobierno.

* Investigadora del Instituto de Investigaciones Económicas, Universidad Nacional Autónoma de México. 1 El bloque Reynosa-Monterrey. El contrato se suscribió con la empresa petrolera Repsol de España por 2 mil 437 millones 196 mil 265 dólares (Pemex 2003).

El bloque Cuervito. El contrato se asignó al consorcio internacional integrado por la compañía brasileña Petróleo Brasileiro, S. A. (Petrobras); la compañía japonesa Teikoku Oil Co. Ltd. y la compañía mexicana D&S Petroleum, subsidiaria del Grupo Diavaz (Pemex, 2003a). El bloque Misión. Se asignó el contrato al consorcio internacional México-argentino integrado por las compañías argentinas Techint y su subsidiaria Tecpetrol y la empresa mexicana Industrial Perforadora de Campeche, por una inversión total de mil 35 millones 579 mil 600 dólares (Pemex, 2003a). El bloque Fronterizo. El contrato se suscribió con el consorcio internacional integrado por la compañía brasileña Petróleo Brasileiro, S. A. (Petrobras); la compañía japonesa Teikoku Oil Co. Ltd. y la compañía mexicana D&S Petroleum, subsidiaria del Grupo Diavaz (Pemex, 2003ª). El bloque Olmos. Se suscribió con la empresa texana Lewis Energy Group (Pemex, 2004). En esta primera ronda que incluía siete bloques, dos quedaron sin asignar. La segunda ronda de licitación de bloques de la Cuenca de Burgos: Bloque Pandura-Anáhuac, Bloque Ricos, Bloque Monclova y Bloque Pirineo, comenzaría en mayo de 2004. 2 Ver artículo en el libro Energía: situación actual y perspectivas, que próximamente publicará el Centro de Investigaciones

Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades de la UNAM, resultado del Coloquio efectuado en mayo de 2006. 3 Ibid. 4 El 23 de marzo de 2005, el presidente Vicente Fox Quesada, junto con sus homólogos de Estados Unidos y Canadá –el

presidente George W. Bush y el primer ministro Paul Martin– anunciaron la puesta en marcha de la “Alianza para la Seguridad y la Prosperidad de América del Norte” (Waco, Texas). Esta nueva alianza se constituye como un compromiso concreto de los tres mandatarios con un enfoque regional para América del Norte.

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